Piensa en verde...

La maravillosa actuación realizada hasta el momento por el equipo de Massachusetts bien merece un buen  artículo de análisis y sobretodo de felicitación. Boston Celtics llegó a Playoffs con la etiqueta de equipo perdedor. Si analizamos a fondo su final de campaña, los números muestran como Celtics perdió su 3ª plaza en la conferencia este y además lo hizo perdiendo contra equipos que no llegaban ni al 40% de victorias. Ese hecho junto al momento crucial de la temporada en que estaban hacía presagiar el final de un ciclo por la vía rápida. 

Muchos, (entre los que me incluyo) pensaban que Celtics no iba a pasar la primera ronda frente a Heat. Un Wade desatado y el equipo de Florida con un récord espectacular de resultados y buen juego durante el último mes y medio de competición, parecían demasiado para unos Celtics a los que se les veía mal físicamente y lo que es peor, parecía que no tuvieran hambre para ganar. Desde USA, la mayoría de analistas NBA sólo tenían malas palabras para el equipo céltico, con David Aldridge en la cabeza que en unas declaraciones llegó a decir que los actuales Celtics habían sido el peor equipo de la historia de la NBA en llegar a las 50 victorias en una temporada. Sin embargo, el ya rebautizado "Big 4" se puso la camiseta de gala e hizo un reset a su mentalidad con el inicio de la fase final de la competición. Los C's parecían otro equipo distinto. Su defensa no tenía nada que ver con lo mostrado hasta el momento. La implicación de varios jugadores había cambiado por completo. Y lo que es más importante en el banquillo, un hombre llamado Glenn "Doc" Rivers tenía muy claro lo que quería de su equipo.

Boston superó la eliminatoria prácticamente sin despeinarse y bien preparados para enfrentarse al que la gran mayoría veían como el gran "Coco" del este, los Cleveland "LeBronavaliers". El 99% de analistas en Estados Unidos lo tenían clarísimo, Cavs iba a pasar esa eliminatoria sin problemas, pues James, al contrario que Wade, sí tenía un equipo plagado de buenos jugadores para ayudarle.

Pero los orgullosos verdes tenían otros planes para el autoproclamado Rey de la NBA. Estos planes no eran otros que enviarle a su casa en Akron para que visualizara las finales desde su sofá. En esta eliminatoria hubo 3 factores totalemtne determinantes para el devenir de la serie. En primer lugar, la figura de "Doc" Rivers. El entreneador de los Celtics había sido cuestionado en la fase final de la campaña regular y los rumores sobre su posible salida del equipo al finalizar la presente campaña iban en aumento. Sin embargo, el bueno de Doc ha demostrado nuevamente que si en la liga hay un puñado de excelentes entrenadores jefe, él forma parte de este selecto grupo. Rivers se merendó tácticamente a Mike Brown o como yo le apodo "la marioneta". Evidentemente, el mérito de superar a Brown en un duelo de banquillos no es demasiado importante, pues Brown puede ser muchas cosas, pero lo que no será nunca seguro es un buen entrenador jefe. No obstante, el mérito lo tiene el hecho de comprobar uno por uno los jugadores de ambas plantillas. Rivers, apostó por una rotación corta, dando la responsabilidad a aquéllos en los que confía y con un planteamiento defensivo impecable para frenar el hombre más poderoso físicamente de la liga. Brown por su lado demostró no saber qué hacer en nigún momento. Cambió la rotación de jugadores cada partido, no supo realizar en ningún momento buenos emparejamientos defensivos ni plantear buenas ayudas. En defenitiva no supo como hacer que su plantilla jugara como un equipo. En mi opinión, la que ha sido sin duda la mejor serie hasta el momento la ganó en un 75% el trabajo realizado desde el banco por los técnicos de Celtics, eso sí, bien ejecutado en el parqué por unos jugadores totalmente entregados, con Rondo en la cabeza. El segundo factor determinante ha sido sin duda la explosión de Rajon Rondo como un grande de la liga. No sólo porque realizara un partido de escándalo en el 4º encuentro de la serie, sino porque él ha sido el alma del equipo sobretodo en el aspecto ofensivo. El tercer y último elemento definitivo, ha sido la falta de implicación de los secundarios de lujo de LeBron James. Jamison, Varejao, O'neal, Williams, West, etc. no han demostrado el nivel de juego que se esperaba de ellos. Lógicamente mucho tiene que ver en ello la falta de respuestas desde el banquillo por Mike Brown, pero ninguno de ellos ha sabido dar un paso al frente cuando se les necesitaba, demostrando que la química que se presumía en el equipo de Ohio no era más que una ilusión.

Pero si esto no hubiera sido suficiente, ayer los verdes volvieron nuevamente a dar una lección ahora sí ante un rival que en su conjunto (cuerpo técnico + roster) tiene una entidad netamente superior. No me refiero en que Van Gundy sea mejor que Rivers como entrenador jefe, que no lo es. Sino en que el head coach de los Magic sí es un entrenador, no cómo Mike Brown, y que Orlando Magic sí ha demostrado saber jugar en equipo, no como Cleveland Cavaliers. El partidazo realizado ayer por los de Massachusetts fue un golpe sobre la mesa de dimensiones estratosféricas. Recordemos que los de Florida no habían perdido ningún partido hasta el momento en Playoffs, y no sólo eso, sino que habían ganado a sus rivales demostrando una superioridad descomunal. Esto sin duda es un claro indicio de que Paul Pierce, Kevin Garnett y compañía no se conforma con 1 sólo anillo de campeón y están dispuestos a dar todo de ellos para ofrecer la que sería la gran sorpresa de estos Playoffs. Lógicamente, la serie frente a Magic no está ganada aunque sí bien encarrilada. Pero de bien seguro que la reacción de Orlando va ser mucho más contundente y efectiva que la que hizo en su momento Cleveland Cavaliers.

Para finalizar me gustaría profundizar más aún en el trabajo realizado por el cuerpo técnico de Boston durante estos Playoffs. Creo que es necesario alabar la figura de Tom Thibodeau, el principal responsable de la defensa mostrada por los verdes hasta el momento Thibodeau ha estado sonando recientemente como posible candidato a entrenador jefe para varios banquillos para la próxima campaña. Les recomiendo se lean la noticia que de The Virus publicó en su Blog para profundizar sobre este tema. Decir que yo no recuerdo a un equipo a un nivel tan alto defensivamente desde aquellos Detroit Pistons que ganaron las Finales a los todopoderosos Los Ángeles Lakers de O'neal, Bryant, Malone, Payton,etc. Casualidades o no de la vida, pero Rasheed Wallace también pertenecía a ese equipo campeón en 2004.

Tambien me ha parecido impecable el trabajo realizado por Rivers en el movimiento del banquillo. Ha sabido rotar a los jugadores indicados en el momento preciso. Ha sacado lo mejor de hombres como Tony Allen, Rasheed Wallace o Glen Davis. Sólo hay una cuestión que a la larga puede pasar factura a los célticos, el enorme minutaje que llevan en sus piernas los integrantes del "Big 4", a excepción de Kevin Garnett que ha tenido más descanso durante los partidos. La falta de más soluciones desde el banco, unido al presumible cansacio acumulado que puedan llevar encima los jugadores importantes de Celtics, puede ser un handicap para ellos, sino en esta eliminatoria en una posible Final frente a Lakers o Suns. No obstante, si la mentalidad sigue estando intacta, muchos de estos jugadores sabrán sobreponerse al cansancio y seguir aportando y produciendo al más alto nivel, con lo que a día de hoy sería una verdadera barbaridad no considerar a Boston Celtics como uno de los principales candidatos al anillo. Personalmente, espero y deseo que podamos ver reeditada nuevamente la final del 2008, pues para mí no existe mejor Final para la NBA que la que puedan protagonizar los eternos rivales Lakers y Celtics.

En conclusión, el orgullo céltico vuelve a estar de moda y se lo tienen más que merecido. Sólo deseo que sigan ofreciéndonos este nivel de baloncesto durante todo lo que resta de Playoffs y que podamos verlos nuevamente en las Finales, pues si hay un equipo que ha luchado por su derecho de estar allí, éste es Boston Celtics.